Las últimas 24 horas han estado marcadas por varios incidentes aéreos. RT les presenta una recopilación de aterrizajes 'milagrosos'.
"Estábamos aterrizando a una velocidad de 280 kilómetros por hora y a unos 100 metros de altura vimos un avión A-340 a la izquierda. Nos habían permitido aterrizar, todo iba bien. Cuando vimos que el otro avión no se iba a detener e iba a seguir moviéndose, decidimos volver a esperar turno de aterrizaje sin esperar instrucciones del controlador aéreo, que permanecía en silencio. Tras realizar ciertos procedimientos necesarios, nos volvimos a poner en contacto con el controlador", dijo el piloto principal del Boeing 767-300 de la aerolínea rusa UTair, Nikolái Limarev, a LifeNews tras el incidente con el Airbus A340-300 de Aerolíneas Argentinas en el aeropuerto de Barcelona el viernes pasado.
Tras el aterrizaje, el controlador aéreo español se puso en contacto con la tripulación rusa y les presentó sus disculpas. Explicó que los pilotos argentinos tenían instrucciones de despegar tras el aterrizaje del Boeing ruso, pero no las siguieron.
"La maniobra que tuvimos que hacer no era en sí misma peligrosa. Otra cosa es que no todos los días tengas que hacer algo parecido. Hay un simulador especial, donde dos veces al año los pilotos experimentan una situación similar. Esto podría ser grave si el tiempo no hubiera estado despejado como hoy", añadió Limarév.
Los hechos del pasado
Según las estadísticas, el número de accidentes aéreos sin víctimas es mucho mayor de lo que se piensa. A continuación les ofrecemos una selección de aterrizajes 'milagrosos'.
En enero de 2013 un piloto de Turkish Airlines logró aterrizar sin problemas en la ciudad de Izmir a pesar de que uno de los motores se había incendiado tras haber sido alcanzado por un rayo durante un vuelo nocturno.
Otro piloto de Turkish Airlines realizó un aterrizaje con viento cruzado en la ciudad de Dusseldorf.
En julio de 2013 un avión de la empresa Southwest Airlines logró tomar tierra sin el tren de aterrizaje en el aeropuerto La Guarda de Nueva York.
En 2008 dos aviones chocaron bruscamente en la pista en Roanoke, Texas, EE.UU. El tren de aterrizaje del primer avión se empotró en la parte superior del ala de otra aeronave. Las hélices chocaron entre sí. Como muestran los informes, los pilotos se estaban comunicando por radio justo antes del accidente.
Fuente: http://actualidad.rt.com/
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